1/2/11

Labbra


Durante aproximadamente una semana, el brillo de la supernova sobrepasa el de todas las demás estrellas de su galaxia. Luego se desvanece rápidamente. Todo lo que queda es un objeto minúsculo y denso (una estrella de neutrones o agujero negro), rodeado por una creciente nube de                           gas muy caliente.
 

     En las noches de insomnio me acerco a ello y odio recordar que debería salir por pies, yo quiero quedarme aquí para siempre. Pero eso no le importa a nadie, ni siquiera te creas que a mi me preocupa tanto después de todo. Así que arranco la caja de cartón de dondequiera que la guarde y leo: Paracetamol blablablá PHARMA 1g. De puta madre, allá vamos. Y así estoy: botella de agua en mano, fármaco en el pecho y yo, una muñeca de nada, me acuno para dormir.

 Un minuto, dos, diez, treinta, dos horas… nada. Hoy tampoco.

     Olor a trementina y cereza, libros amontonados que no me voy a leer, discos apilados que no voy a escuchar, ropa sucia que no voy a lavar, velas consumidas que no tiraré y muchas otras cosas por las que debería preocuparme pero que no me preocupa ¡ah!  y el paracetamol no ayuda.

Una mosca, el cielo aplastado en un rincón, un agradable sabor a podrido gestándose en mi boca: café con… ¿fruta? Supongo. Luego querré un chicle.

     Hay millones de puntos sanos en el cielo, pero alguien ha decidido escribir algo sobre una estrella moribunda. Me gustaría conocer a esa persona, ¿porqué alguien escribiría algo enternecedor teniendo como eje central una estrella muerta? ¿por amor? ¿por amor al arte? ¿por arte? ¿por estupidez? ¿Porque quería decir algo? ¿o porque sí? A lo mejor es por lo mismo que yo no puedo dormir pensando que me duele la cabeza, me he chutado a base de paracetamol, apesto a sustancias químicas que no sé de qué están hechas, me he clavado una chincheta en el pie derecho y he creído fervientemente que había encontrado otro lunar en mi brazo durante cero coma siete minutos cuadrados.  

Nebulosas hechas de escamas y colas de sirenas que alguna vez se enamoraron de asesinos imaginarios. Buenas noches, mundo.

2 comentarios: